Sí, "Vivo Cantando", esa "maravillosa" oda a la constante resignación por cantar y bailar pese a tener que escuchar "arte" como ese. Qué decir de Salomé y su agridulce triunfo en Eurovisión 1969, cuando se ve forzada a compartir ese gustito victorioso con otros tres melosos olvidables. Porque, claro, ¿quién no recuerda a Frida Boccara sin buscar en Google? Sí, amantes de las abouts sin sabor, esas canciones tienen la profundidad de una gota de condensación en una botella de plástico en el vertedero musical de la historia. Y aún más irónico, ese vertedero está lleno de otros productos manufacturados más recientes y aún más repulsivos como la blasfemia sonora a la que Pitbull y Jennifer López someten los tímpanos humanos. Pero, claro, me pregunto, con toda la 'sabiduría' que tengo, si habrá un pordiosero musical, de seguro una de esas devastadoras arenas movedizas, en la que "Vivo Cantando" quedará eternamente atrapada.