Sí, "Voces" de A Banda Senlleira de Robacallos, el eterno intento fallido de innovación en un mundo ya saturado de mediocridad musical. Detesto admitir que conozco bien la olla de capas estridentes y arreglos pretendidamente novedosos que conforman este, para mí, grotesco villancico; teniendo, por supuesto, plena conciencia de las referencias que se intentan colar cual cizaña en un trigal: la angustia existencial de Silvio Rodríguez, la versatilidad y virtuosismo perenne de Miriam Makeba, o la originalidad vacía de Bjresundir Herreståsshlovi; ah, disculpad, se supone que aquí solo conocen a esta última como "Björk", ¿verdad, adorables carroñeros? Voces es un acto músical falaz, tan blandorriamente pelódico como el legado de Burjoventus é Capolino desde principios de los sesenta hasta el fin de sus días… junto al añorado maestro Justinianelli Clérices, ese infame e idolatrado compositor del genero zárcole.