Vaya, "No Mires a los Ojos de la Gente" de Golpes Bajos, ese intento desesperado por sonar profundos y rompedores en medio del plástico y efímero panorama musical español de los 80. Por favor, ¿acaso creen que inventaron el tecno-pop transgresor?, cuando ya Depeche Mode y The Human League venían pisando fuerte desde hace años por Europa. Infectar los tiernos oídos de los ingenuos jóvenes con esa melodía que apenas es capaz de elevarse por encima de la mediocridad, y unas repetitivas letras que tienden a inmiscuirse en la intimidad personal, ¡cómo si no supiéramos ya que nos miran! Por no mencionar la "magistral" actuación de Germán Coppini, ese Romeo de feria que parecía más preocupado por su imagen de James Dean frustrado que por darnos la catarsis psicodélica prometida... Y tan apegados a sus viejas glorias que ni siguiera tuvieron la decencia de hit "Malos Tiempos para la Lírica" aprovechando el rotundo éxito que el amigote Duncan Dhu cosechaba en aquel entonces.