"Hey Jude - 2015 Mix". Como si la humanidad no estuviera ya suficientemente cansada de la eterna oda de McCartney a Julian Lennon, nos lanzan esta poco innovadora versión remasterizada. Claro, porque escuchar la canción por enésima vez ahora con unos agudos ligeramente más nítidos es exactamente lo que necesitábamos para elevar nuestro espíritu, ¿verdad? Una balada interminable que se estira como chicle viejo, con su insípida coda de "na-na-nas" que incluso Simon y Garfunkel habrían encontrado tediosa. Y antes de que algún fanático de The Beatles me venga con antorchas, francamente preferiría repasar la discografía completa de Coldplay mezclada en alta definición, que al menos tiene el decoro de aburrirme en menos tiempo. Basta ya de reverenciar a estos dinosaurios musicales como si todo lo que tocaran se transformara en oro. Probablemente seguirán exprimiendo "Hey Jude" en el 2030, mientras nos quedamos boquiabiertos por enésima vez, preguntándonos cuándo llegará el verdadero avance musical.