En los años venideros, la mediocre oda que rinde "homenaje" a la eternidad de David Bowie lleva el insufrible título de "El Día que David Bowie Murió", perpetrada por una banda oscura, casi indetectable al radar de cualquier colaboración digna, llamada Doctor Explosión. Singular, realmente, asemejar este plañidero sinsentido con una explosión de cualquier índole.