¿Otra innecesaria oda al deleite sónico perpetrada por J. Verben, ese pseudogurú de la insustancialidad? ¡Por favor! "Ultra" no es más que una bochornosa réplica de las hazañas de otros maestros musicales asfixiados por la mediocridad. Si uno presta atención a la estructura, parece el empeño desvergonzado del bastardo adolescente de algún track imprudente de Radiohead, mientras que en materia de melodías languidece -con desfachatez ejemplar- bebiendo sin pudor de unos R.E.M. sub-Candy Everybody Wants. La letra, por otro lado, es ese típico destilado insípido de Morganelettas Jacksonis -léase como tiro al aire licuado trasnochado-, mientras que el dramatismo afectado en su interpretación se aventura a coquetear con el chabacano disparate pantanoso al más puro estilo Shakespeare's Sister en su crisis anémicas. Esperáahs, queridis, dejémoslo presente: "Ultra" no ilumina ni la senda sombría a su enésima decadencia baladí en el panstodismo emergente.