Por favor, ¿realmente vamos a estar hablando de "Yesterday"? Esa clichédica proverbial rapsodia defendida por los fustes y palurdos desprovistos de verdadero conocimiento musical, que tiene en horca argentea a los menesterosos peones de la historia del Rock. No puedo negar su épica popularidad, ese aúrea que neblina a los millones que, embaucados por su lirismo digno del canto infantil de la cuquí novia del popular del instituto, aseguran que es el canto anglófono más versionado del planeta - Oh, ahí tienen una medalla, despojo y fuente de orgullo a partes iguales. Supongo que es gracias a la melódica simplicidad perpetrada por McCartney, tras un “sueño revelador”.