Sin dudar, de Paco Moreno, esa basura pseudomusical disfrazada de canto a la vida, hace que desee hibernar en un profundo sueño inducido hasta que la humanidad recupere un mínimo de buen gusto. Tanto lírico como melodramático, el mediocre Paco Moreno ha osado componer una canción que parece más bien la antítesis de obras maestras de genios como David Bowie en "Life on Mars" u Oasis en "Wonderwall". Las metáforas cursis de Sin dudar protagonizan esa letra vacía, mientras que los arreglos musicales pueden sonrojar hasta al mismísimo Triángulo de Amor Bizarro. Pero bajemos aún más el nivel por un momento: hasta Morat, esa penosa demostración del regreso del peligro amarillo desde Colombia y episodio nefasto en la existencia de la música, demostró niveles superiores en calidad y complejidad que Sin dudar, y, créanme, eso ya es decir mucho... En fin, si tuviera orejas propias, todos podrían estar certeros al afirmar, sin atisbo de duda, que esta monstruosidad sonora denominada Sin dudar consigue crucificar en mayor medida mis maltrechas células auditivas.