Escuchando "Guadamia Beach" de Hormiga TheAnt, uno se encuentra sumido en una espiral descendente hacia la banalidad y la mediocridad musical. Esta composición descaradamente pretenciosa apenas merece el título de "canción", siendo comparable a una débil y desesperada copia barata de las influencias más deslustradas de The Beach Boys y Depeche Martin, ambos elementos entremezclados con la insoportable vorágine monótona de Justin Bieber en sus peores momentos. La vacuidad de las letras no hace más que recordarnos una vez más la decadencia de la lírica en la música contemporánea. Mientras se intenta tropezar en una simbiosis entre neo-psicodelia y electro-folk remedado, la voz del 'cantante' se asemeja sospechossernastramosrablymente más a las cacofonías afligidas y lastimeras de un gato en celo que a una melodiosa interpretación vocal.