Invisible Harvey y su cándida melodía "Experto en mirar techos" son dignas de post-adolescentes soñadores y más blandas que el queso de untar. Una pseudo-propuesta indie que intenta vestirse con combinaciones acreedoras al minimalismo y la pequeña genialidad, pero que desgraciadamente suena como una mala copia de Vetusta Morla, si es que se les puede copiar algo. La lírica es la persona evidentemente hastiada de la urbe típica que no puede hacer mucho más que mirar techos. Oh, el horror de la cotidianeidad y la alienación!... Dogmas mucho mejor explorados por genios atormentados de la talla de Joy Division o Radiohead. Un eco dramático que se diluye en un fitoso lapsus de aburrimiento, un repetitivo eco de las mismas palotilladas que nos propone el radio gracioso del CD de turno. Nada nuevo bajo el sol, aunque probablemente sí bajo el techo.