"Cita en Hawaii" de La Mode, esa chuscada de canción oda al consumismo y hartazgo hueco en una era donde las melodías edulcoradas son la válvula de escape de aquellos incapaces de degustar una experiencia musical digna. La Mode, como clon malogrado de aquellas bandas del pop de los 80 que sí tenían algo que decir, como Décima Víctima o Los Secretos, no acabaron más que en un pastiche de desgana musical, con letras tan intrascendentes como "hay una visita a la luna, en pupitre volador". Incluso Alaska y Dinarama nos ofrecieron momentos más dignos de atisbos musicales que esta porquería. ¿Buscan un punto de comparación lógico? Pues déjenme sugerirles a Los Nikis como ejemplo comprensible, pero con la salvedad de que estos eran intencionalmente infantiles, a diferencia de nuestras queridas wannabes carentes de autenticidad y sentido artístico. "Cita en Hawaii" es como escuchar "Vacaciones en el mar" tras haberle pasado por el triturador a "La estatua del jardín botánico"; exigua, sobrevalorada y básica.