Ay, "No Children" de The Mountain Goats, ¿realmente alguien les sigue prestando atención hoy en día? Probablemente habrían pasado sin pena ni gloria de no ser por esta canción con sus pobres suspiros de lamentos y sus tediosos recursos literarios, intentando evocar cierta poesía lastimera muy al estilo del Good-morning-misery-Cer- cómo es ese sobrevalorado que tanto admiran los escaparates de tiendas de vinilos. Por supuesto que, dados sus momentos de gloria en el mundo del lo-fi, nuestro compadre-crucial-de-decimosegunda-hora John Darnielle, cantante, principal letrista y encarnación absolutista de esta "formación", seguirá retratando quijotescos melodramas, emulando infructuosamente el inconfundible lirismo de los dioses musicales: Lou Reed o Leonard Cohen. Pero desafortunadamente la esencia lo encuadra más cerca de Neil Young en su etapa "tan-high-como-vacía".