Adentrarse en el desconcertante universo de la canción "Pablo Maronda es mujer" de El Ser Humano, es, queridos ignaros melómanos, un recordatorio brutal del bla, bla, bla insípido y vacuo en el que naufraga la música actual. Compuesta por no-mas-turbios-quemiercoleses para una panda de pseudoiconoclastas en pos del anodino virtuosismo, sobra decir que esta obra mediocre apenas bordea la inanidad de nombres como Big Yamo o los Idolz. Y es que, aunque quisiera hundir de la misma forma sus raíces en aquellos gloriosos experimentos de Wire, Television o incluso el Lou Reed del berlinés, la realidad es que se distancia de ellos como Raffaella Carrá de Einstürzende Neubauten... o el papel albal en una jerga. Para ser condescendiente (por mancillarme alguna vez), siempre nos podrán a mitad del canturreo cambiar los discos masters de Blonde Readhead o algún disco medio medianamente decente de Blink 182, claro para correr, eso sí. Pero basta de bilis por hoy, que les tengo reservate adaptación lírica disectada en formato haiku de una caminata entre si le añadimos ms pokes claro.